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Mostrando entradas de febrero, 2021

CAPÍTULO 27: EL COMERCIO DE LAS BEBIDAS ALCOHÓLICAS - Ministerio de curación

  EL COMERCIO DE LAS BEBIDAS ALCOHÓLICAS "¡AY DEL que edifica su casa y no en justicia, y sus salas y no en juicio!... Que dice: Edificaré para mí casa espaciosa, y airosas salas; y le abre ventanas, y la cubre de cedro, y la pinta de bermellón. ¿Reinarás porque te cercas de cedro?... Mas tus ojos y tu corazón no son sino a tu avaricia, y a derramar la sangre inocente, y a opresión, y a hacer agravio." "(Jeremías 22:13-17.) La actuación del vendedor de bebidas Este pasaje describe la obra de los que fabrican y venden bebidas embriagantes. Su negocio viene a ser un robo. Por el dinero que perciben, no devuelven equivalente alguno. Cada moneda que añaden a sus ganancias ha dejado una maldición al que la gastó. Con mano generosa Dios derrama sus bendiciones sobre los hombres. Si sus dones fueran empleados con prudencia, ¡cuán poca pobreza y miseria conocería el mundo! La iniquidad humana trueca las bendiciones divinas en otras tantas maldiciones. El lucro y la perv

CAPÍTULO 26: Estimulantes y Narcóticos - Ministerio de curación

 Estimulantes y Narcóticos BAJO el título de estimulantes y narcóticos se clasifica una gran variedad de substancias que, aunque empleadas como alimento y bebida, irritan el estómago, envenenan la sangre y excitan los nervios. Su consumo es un mal positivo. Los hombres buscan la excitación de estimulantes, porque, por algunos momentos, producen sensaciones agradables. Pero siempre sobreviene la reacción. El uso de estimulantes antinaturales lleva siempre al exceso, y es un agente activo para provocar la degeneración y el decaimiento físico. Los condimentos En esta época de apresuramiento, cuanto menos excitante sea el alimento, mejor. Los condimentos son perjudiciales de por sí. La mostaza, la pimienta, las especias, los encurtidos y otras cosas por el estilo, irritan el estómago y enardecen y contaminan la sangre. La inflamación del estómago del borracho se representa muchas veces gráficamente para ilustrar el efecto de las bebidas alcohólicas. El consumo de condimentos irritan

CAPÍTULO 25: Los extremos en la alimentación - Ministerio de curación

Los Extremos en la Alimentación     NO TODOS los que aseveran creer en la reforma alimenticia son realmente reformadores. Para muchos la reforma consiste meramente en descartar ciertos manjares malsanos. No entienden bien los principios fundamentales de la salud, y sus mesas, aun cargadas de golosinas nocivas, distan mucho de ser ejemplos de templanza y moderación cristianas. Otra categoría de personas, en su deseo de dar buen ejemplo, cae en el extremo opuesto. Algunos no pueden proporcionarse los manjares más apetecibles, y en vez de hacer uso de las cosas que mejor podrían suplir la falta de aquéllos, se imponen una alimentación deficiente. Lo que comen no les suministra los elementos necesarios para obtener buena sangre. Su salud se resiente, su utilidad se menoscaba, y con su ejemplo desprestigian la reforma alimenticia, en vez de favorecerla. Otros piensan que por el hecho de que la salud exige una alimentación sencilla, no es necesario preocuparse por la elección o

CURSO LA FE DE JESÚS - Colección de Himnos Instrumentales andino

CURSO LA FE DE JESÚS

CAPÍTULO 24 LA CARNE CONSIDERADA COMO ALIMENTO - Ministerio de curación

La Carne Considerada Como Alimento El régimen señalado al hombre al principio no incluía ningún alimento de origen animal. Hasta después del diluvio cuando toda vegetación desapareció de la tierra, no recibió el hombre permiso para comer carne. Al señalar el alimento para el hombre en el Edén, el Señor demostró cuál era el mejor régimen alimenticio; en la elección que hizo para Israel enseñó la misma lección. Sacó a los israelitas de Egipto, y emprendió la tarea de educarlos para que fueran su pueblo. Por medio de ellos deseaba bendecir y enseñar al mundo. Les suministró el alimento más adecuado para este propósito, no la carne, sino el maná, "el pan del cielo." Pero a causa de su descontento y de sus murmuraciones acerca de las ollas de carne de Egipto les fue concedido alimento animal, y esto únicamente por poco tiempo. Su consumo trajo enfermedades y muerte para miles. Sin embargo, nunca aceptaron de buen grado la restricción de tener que alimentarse sin carne. Siguió sie