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Lección 9: ¡BENDITO EL QUE VIENE EN EL NOMBRE DEL SEÑOR! | El Libro de Salmos | Libro complementario

Lección 9:

¡BENDITO EL QUE VIENE EN EL NOMBRE DEL SEÑOR!

El fin de semana de Pascua en la Southern Adventist University es especial. El sábado anterior al domingo de resurrección, se lleva a cabo una representación de los últimos días del ministerio de Cristo en la Tierra, que culmina con escenas de la crucifixión y la resurrección. En la representación de la Pasión participa todo el complejo universitario, comenzando en la iglesia con una escena introductoria, pasando después por un zoo de animales bíblicos (con alguna que otra llama), hasta llegar a la antigua Jerusalén, situada a lo largo del paseo central del predio. El escenario está repleto de puestos de vendedores ambulantes, artesanos, niños cantores, y otras escenas que podrían representar la Ciudad Santa en tiempos de Jesús.

Luego continúa la escena de la Última Cena, donde Jesús lava solemnemente los pies a sus discípulos. El Getsemaní se desarrolla en un prado abierto junto a la residencia para varones, y el sufrimiento de Cristo se hace tangible cuando suda sangre mientras lucha contra los ataques de un Satanás amenazador. El palacio de Pilatos está situado entre las columnas de Wright Hall, el edificio administrativo central del predio. Desde allí, un Jesús azotado es sentenciado y arrastrado en medio de una turba burlona hasta el Calvario, una pequeña colina junto a la pista de atletismo. Se hace silencio cuando Jesús exhala su último suspiro, y los visitantes caminan lenta y pensativamente hacia el gran gimnasio para contemplar la escena de la Resurrección.

Hasta diez mil personas visitan el campus ese sábado, acompañadas por un guía en grupos de entre seiscientas y ochocientas personas. Mis hijos han formado parte del elenco de más de quinientos estudiantes, profesores y miembros de la iglesia, interpretando a los burlones espectadores del palacio de Pilato o a los soldados romanos con pesadas armaduras, o trabajando en la escena de la Resurrección.

Mis hijos siempre han vuelto a casa muy contentos, inspirados una vez más por la vida, la muerte y la resurrección de Cristo.

Nuestra familia ha paseado a menudo como observadora por la representación de la Pasión y ha disfrutado de la reacción de la gente que viene de los alrededores a nuestro predio. En una ocasión, recuerdo que caminaba detrás de un grupo de unos veinte visitantes de habla árabe. Mi árabe es bastante limitado y se basa en un puñado de palabras que aprendí viajando y trabajando en Medio Oriente, pero hay una palabra que oía repetidamente y que podía entender con claridad. Mientras escuchaba la animada conversación que se desarrollaba frente a mí, oí la palabra Isa, el nombre que se da a Jesús en el Corán. Los cristianos árabes suelen utilizar Yasu' como el nombre de Jesús, basándose en el hebreo Yeshua,1 así que, era casi seguro que el grupo que estaba siguiendo consistía en musulmanes que habían decidido asistir a la representación. Parecían estar hablando de Jesús, a quien estaban conociendo mientras lo seguían por la antigua Jerusalén en el campus de la Southern Adventist University.

DAVAR - El Mesías anunciado en Salmos

Las poderosas escenas del Calvario también están presentes en el libro de Salmos. Martín Lutero comentó en una ocasión que el Salterio "debería sernos precioso y estimado, aunque solo fuera porque predice con la mayor claridad ia muerte y la resurrección de Cristo, y describe su Reino, y la naturaleza y posición de todo el pueblo cristiano. Bien podría llamarse una 'pequeña Biblia', ya que contiene, expuesto de la forma más breve y hermosa, todo lo que se encuentra en toda la Biblia".1 Parece que el gran reformador alemán entendía que el Mesías venidero era un tema teológico crucial y central en el libro de Salmos, ya que presenta una perspectiva profética clara y detallada de la venida de Jesús, el Cristo.

Sin embargo, dado que cada salmo fue escrito en un contexto histórico concreto, es necesario preguntarse: ¿cuáles son los criterios para identificar una profecía mesiánica en Salmos? ¿Cómo determinamos si la profecía solo se refiere a un personaje del Antiguo Testamento, como un rey israelita? Por ejemplo, el trasfondo histórico del Salmo 2 es la coronación de un rey israelita en el monte Sión, muy probablemente Salomón, durante la tumultuosa época de la monarquía unida (Sal. 2:6). Sin embargo, en Salmos 2:7 leemos una afirmación familiar que posee connotaciones mesiánicas, que luego se reiteran en el Nuevo Testamento y se aplican a Cristo, el Mesías (cf. Heb. 1:5): "El Señor dijo: 'Mi hijo eres tú, te engendré hoy'". Por consiguiente, al elevar el lenguaje más allá del contexto histórico y al ser aplicado a Cristo bajo inspiración en el Nuevo Testamento, se manifiesta claramente el carácter mesiánico del Salmo 2.

Además, como señala Walter Kaiser, un distinguido erudito evangélico del Antiguo Testamento, los autores del Antiguo Testamento también eran conscientes, en su mayoría, del significado profético de lo que Dios les había inspirado a escribir: "Las descripciones del Mesías venidero no debían ser una asociación aleatoria de predicciones heterogéneas, introducidas arbitrariamente en el AT o elegidas al azar para adaptarse a los propósitos de los escritores del Nuevo Testamento. Por el contrario, eran parte de un plan continuo de Dios, cada uno de ellos vinculado a una corriente continua de anuncios que seguían ampliándose y creciendo a medida que avanzaban en el progreso de la revelación".2 Sugiere, además, "que hay [en el Antiguo Testamento] al menos sesenta y cinco profecías directas y sin rodeos del Mesías que estaban destinadas a ser aprendidas (nota: no comprendidas) por los públicos a los que se dirigieron por primera vez".3

En la siguiente se encuentra una lista seleccionada de pasajes mesiánicos tabla del libro de Salmos al lado de sus homólogos del Nuevo Testamento, acompañados de un breve comentario4 para aclarar cualquier cuestión interpretativa que exista. La lista no es exhaustiva, sino que se centra en los pasajes que conectan directamente con la vida, la muerte y la resurrección de Cristo.5

Referencia AT

Comentario

Referencia NT

Salmo 2:7

La divinidad y la filiación de Cristo (ver también Mat. 3:17; Juan 5:19-23, 25, 26; Hech. 13:33; Heb. 5:5), con la metáfora de Dios como Padre, aparecen con frecuencia en los salmos (por ejemplo, Sal. 68:5; 89:26, 27).

Salmo 2:7


Salmo 2:8

Jesús cita la traducción griega del Antiguo Testamento; de ahí la ligera variación entre Salmo 2:8 las referencias del Antiguo Testamento y del Nuevo Testamento. Dios confunde a los soberbios por medio de los indefensos.

Mateo 21:15,16


Salmo 8:6

La transferencia de dominio recuerda el relato de la Creación de Génesis 1:26 al 28. La referencia de Hebreos 2:8 transfiere y Hebreos extiende este dominio irrevocablemente a 2:8 Cristo. La humanidad está a salvo bajo el dominio de Cristo.

Hebrero 2:8


Salmo 16:10

Cristo, al resucitar del sepulcro (el término hebreo sheol es sinónimo de "tumba"), se Salmo convierte en el primer fruto de la victoria 16:10 sobre la muerte y proporciona la garantía para todas las resurrecciones anteriores y posteriores (cf. Mat. 28:7).

Hechos 22:11


Salmo 22:1

Jesús cita el versículo textualmente en ara-meo. Este texto es el centro de sus siete dichos en la cruz, expresando su sentimiento de abandono al quebrarse bajo el peso de los pecados de este mundo. El lenguaje del salmo se conecta con otras profecías mesiánicas del Antiguo Testamento.

Mateo 27:46


Salmo 22:7.8

En esta parte del Salmo 22 se describen Salmo las burlas deshumanizadoras con las que 22:7, 8 Cristo es escarnecido en la cruz por la muchedumbre que cuestiona su divinidad.

Lucas 23:35


Salmo 22:15

La sed de Cristo en la cruz ejemplifica el debilitamiento de su fuerza humana y la proximidad de su muerte (ver también Sal. 69:21). Él rechaza la bebida soporífera Juan 19:28 amarga para no embotar sus sentidos en este momento tan decisivo de la Gran Controversia (Mat. 27:34).

Juan 19:24


Salmo 31:5

Jesús se apropia de estas palabras en la cruz, confiando su "espíritu" a Dios. El término hebreo ruaj ("espíritu, aliento") se refiere al poder divino de Dios que da vida a los seres humanos y la retrae en el momento de la muerte (Gén. 2:7)

Lucas 23:46


Salmo 34:20

Así como los huesos del cordero pascual no fueron rotos (Éxo. 12:46), así también el antítípico Cordero de Dios fue protegido aunque sufrió una muerte terrible.

Juan 19 33


Salmo 41:9

La traición de David por uno de sus amigos y consejeros más cercanos, posiblemente Ahitofel (2 Sam. 15:31), apunta a la traición dejudas ajesús tras la Última Cena. Comer juntos en el Antiguo Cercano Oriente creaba fuertes lazos, lo que exacerbaba aún más la consiguiente traición.

Lucas 22:47


Salmo 68:18

La imagen de la procesión de la victoria de un rey, que regresa de la batalla con sus cautivos y tesoros, es retomada por Pablo Efesios 4:8 y aplicada a la ascensión Cristo, que ha vencido a la muerte y nos llevará a casa con él.

Hechos 1:9-11


Salmo Salmo 109:8

Al traicionar Jesús y ahorcarse después, judas se convirtió en una maldición. Al fundar la iglesia cristiana, los discípulos lo sustituyeron por Matías para completar el número de apóstoles.

Lucas 22:47


Salmo 110:4

Melquisedec, el rey-sacerdote de Salem (Gén. 14:18-20), solo aparece aquí y de nuevo en la Epístola a los Hebreos. Dado que el rey David no poseía atribuciones sacerdotales, las intenciones mesiánicas del versículo son evidentes.

Hebreo 5:6


Salmo 118:22

La piedra rechazada se convierte en la "piedra angular" (Luc. 20:17, NVI), que proporciona el soporte fundacional de un edificio. Luego del rechazo, el Mesías es glorificado, ya que él es el fundamento de un nuevo templo vivo (ver Efe. 2:20-22; 1 Ped. 2:4-8).

Lucas 20:17


Salmo 118:25, 26

Los cuatro Evangelios Incluyen esta cita del salmo. El grito inicial de "Hosanna" cuando Jesús entra en Jerusalén (Mat. 21:9,15; Mar. 11:9; Luc. 19:38; Juan 12:13) refleja el hebreo hoshia nah ("¡por favor, salva ahora!"). Esto indica urgencia, y no solo júbilo. Todo esto se hace "en el nombre del Señor", lo que transmite sumisión y pertenencia.

Mateo 21:9



PESHER - Jesús y el libro de Salmos

Jesús no solo leía Salmos, sino también los citaba más que a ningún otro libro del Antiguo Testamento (después del profeta Isaías).

Esto cimentó el estatus canónico del Salterio en la naciente iglesia cristiana. En el Sermón de la Montaña, la exaltación de los "mansos" (Mat. 5:5) nos recuerda al Salmo 37:11. Las provisiones de Dios para los "que tienen hambre y sed de justicia" (Mat. 5:6) son una referencia a Salmos. Las disposiciones de Dios para los "cuervos" (Luc. 12:24), y, por extensión, para nosotros, se remontan al Salmo 147:9.

"¡Apártense de mí, obradores de maldad!"' (Mat. 7:23), las palabras de Jesús a quienes lo siguen de boca para afuera pero no de corazón, están tomadas del Salmo 6:8.

Hacia el final de la vida de Cristo, las referencias a los salmos se hicieron más frecuentes. Hay nueve citas en el relato de la Pasión. Luego de su entrada triunfal en Jerusalén, llora por la ciudad que ha perdido su "paz" (Luc. 19:42), citando el Salmo 122:7, 8 (Jesús sigue aquí a la Septuaginta griega). Luego de devolver la paz al Templo al expulsar a los mercaderes, la alabanza, la enseñanza y la curación vuelven a sus recintos (Luc. 19:43-46; Mat. 21:12-14).

Y luego está el Salmo 22, está repleto de estas referencias y los dirigentes burlones de Israel habían citado horas antes el mismo salmo, resaltando así, sin saberlo, su significado mesiánico (Mat. 27:43; cf. Sal. 22:7,8). Jesús murió antes de poder recitar todo el Salmo 22. Sin embargo, su cita del primer verso nos sirve de desafío para completar el recitado del poema en su totalidad al contar la buena nueva de la muerte y la resurrección de Cristo mientras dure la historia: "La recitación debe continuar, porque la historia ha de volver a contarse 'a las generaciones futuras' (Sal. 22:30, NVI; ver también Sal. 102:18). Todos necesitan oír "todo lo que él ha hecho" (Sal. 22:31, NTV).8

EDUT - Levántate, mi amor

La escena final de la representación en la Southern Adventist University es una experiencia impresionante:6 una tranquila tumba custodiada por cansados soldados romanos se convierte en un campo de batalla entre Gabriel, que ha sido enviado para llamar al Salvador a salir de la tumba, y Satanás, que disputa el cuerpo muerto de Cristo contra el mensajero celestial que da vida. Con la letra de la canción "Arise, My Love" [Levántate, amor] de fondo, la batalla épica se desarrolla frente a la tumba de piedra. Satanás es finalmente derrotado por Gabriel y arrojado a un "lago" de fuego integrado en el escenario, acompañado de una fuerte explosión y un sinfín de fuegos artificiales. La piedra rueda hacia atrás y Jesús sale. La escena presenta un climax glorioso al consumarse la redención.

Al principio, dudamos un poco en ver la escena con nuestro hijo menor, Matías, ya que no estábamos muy seguros de cómo reaccionaría ante la conmoción, las explosiones y la pirotecnia. Tenía unos seis años cuando lo llevamos por primera vez. Estaba sentado en mi regazo y me dispuse a taparle los oídos cuando llegó el momento de vencer a Satán y arrojarlo al pozo de fuego. Pero llegué demasiado tarde y se produjo la explosión. Nunca olvidaré la reacción espontánea de mi hijo cuando el mal fue vencido y Cristo resucitó. Levantó sus bracitos y gritó a todo pulmón: "¡Sí!", animando a Gabriel. Pura alegría. En ese momento, para él, la resurrección se convirtió en una realidad tangible. Y lo sigue siendo.

TEHILLIM - Hoy ha resucitado

La Cruz está vacía.

Desechada y pudriéndose.

El Sábado trae descanso.

Parece que ha triunfado el mal.

La tumba está vacía.

Desocupada y llena de aire fresco.

Mi corazón está lleno de agradecimiento mientras canto:

"Cristo el Señor ha resucitado hoy".

El rey David dirá: "Te lo dije",

cuando nos encontremos en el día de la resurrección final,

Y sonreiremos, ambos redimidos.

-Martin G. Klingbeil,


 

1  Martin Luther, Martin Luther: Selections From His Writings, ed. John Dillenberger (Nueva York: Random House, 1962), p. 38.

2  Walter C. Kaiser Jr., "Biblical Theology and the Interpretaron of Messianic Texts", Andrews University Semirtary Studies, vol. 34, N° 2 (1996), p. 208,

3  Ibíd.

4  Los comentarios están basados en Klingbeil, "Psalms 1-75", pp. 37-311; Santrac, "Psalms 76-150", pp. 313-680.

5  Marcos Paseggi, "A Poem ¡n Progress", Adventist Review, 28 de marzo de 2013, p. 277.

6  Un video grabado por un aficionado de esta representación de la resurrección puede verse aquí: https://www.youtube.com/watch?v=JVcTZIg1DPU beginning at 10:20.

 





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