32. APASIONAMIENTO Y AMOR CIEGO En el noviazgo se necesita el sentido común. Los jóvenes confían demasiado en los impulsos. No deberían entregarse demasiado presto ni dejarse cautivar tan pronto por el exterior atrayente del objeto de su afecto. El noviazgo tal cual se realiza en esta época es una farsa e hipocresía con la cual el enemigo de las almas tiene más que ver que el Señor. Si en algo se necesita el buen sentido es en esto, pero el hecho es que éste tiene poco que ver en el asunto. - RH , 26 de enero de 1886; MJ 447, 448. Desarrollar los rasgos más nobles. Las ideas sobre el noviazgo tienen su fundamento en conceptos erróneos con respecto al matrimonio. Siguen el impulso y la pasión ciega. El noviazgo es conducido con un espíritu de flirteo. Las parejas con frecuencia violan las reglas de la modestia y la reserva y son culpables de indiscreción, si es que no quebrantan la ley de Dios. No perciben el supremo, elevado y noble propósito de Dios al instituir el matrimon