Dan 8:14 Y él dijo: Hasta dos mil trescientas tardes y mañanas; luego el santuario será purificado. Heb 8:1 Ahora bien, el punto principal de lo que venimos diciendo es que tenemos tal sumo sacerdote, el cual se sentó a la diestra del trono de la Majestad en los cielos, Heb 8:2 ministro del santuario, y de aquel verdadero tabernáculo que levantó el Señor, y no el hombre. Heb 8:3 Porque todo sumo sacerdote está constituido para presentar ofrendas y sacrificios; por lo cual es necesario que también éste tenga algo que ofrecer. Heb 8:4 Así que, si estuviese sobre la tierra, ni siquiera sería sacerdote, habiendo aún sacerdotes que presentan las ofrendas según la ley; Heb 8:5 los cuales sirven a lo que es figura y sombra de las cosas celestiales, como se le advirtió a Moisés cuando iba a erigir el tabernáculo, diciéndole: Mira, haz todas las cosas conforme al modelo que se te ha mostrado en el monte. Heb 8:6 Pero ahora tanto mejor ministerio es el suyo, cuanto es mediador