El ejemplo de Cristo nos da poder para resistir la tentación Aconteció que cuando todo el pueblo se bautizaba, también Jesús fue bautizado; y orando, el cielo se abrió, y descendió el Espíritu Santo sobre él en forma corporal, como paloma, y vino una voz del cielo que decía: Tú eres mi Hijo amado; en ti tengo complacencia. Lucas 3:21, 22 . Los profesos seguidores de Cristo pueden ser hechos fuertes en el Señor si aprovechan las provisiones hechas para ellos por medio de los méritos de Jesús. Dios no ha cerrado los cielos para no oír las oraciones humildes de almas humildes y creyentes. La oración humilde, sencilla, ferviente y perseverante del que es fiel, entra en el cielo ahora tan seguramente como lo hizo la oración de Cristo [cuando fue bautizado]. El cielo se abrió cuando oró, y esto nos muestra que podemos ser reconciliados con Dios, y que se establece la comunicación entre Dios y nosotros por medio de la justicia de nuestro Señor y Salvador. Cristo tomó sobre sí la