Lunes, 20 de enero: El llamado a adorar Dura fue la prueba que arrostraron... estos jóvenes cuando Nabucodonosor publicó el edicto que obligaba a todos los funcionarios del reino a reunirse para la dedicación de la enorme imagen, y a arrodillarse y adorarla cuando sonaran los instrumentos de música. Si alguno desobedecía esa orden, inmediatamente sería arrojado en un horno ardiente. La idea de adorar esa imagen había nacido en el círculo de los sabios de Babilonia, quienes querían que los jóvenes hebreos se unieran a su culto idolátrico. Estos eran magníficos cantores, y los caldeos que rían que olvidaran su Dios y aceptaran el culto de los ídolos babilónicos. Llegó el día señalado, y cuando resonó la música, la inmensa muchedumbre que se había congregado obedeciendo la orden del rey, "se postraron, y adoraron la estatua de oro". Pero estos jóvenes fieles no se arrodillaron (Mi vida hoy, p. 70). El Señor se dio a conocer a los paganos de Babilonia mediante los cauti